La criptomoneda Ethereum, la segunda más importante en el mundo tras el bitcoin, completó este jueves una mutación tecnológica clave para su futuro, que le permitirá reducir prácticamente en un 99% su consumo de energía.
Ethereum empezó a funcionar mediante una cadena de bloques encriptados los cuales se crean de forma incesante por miles de computadores en todo el mundo, de forma autónoma y automática con ello la moneda pasa de un sistema conocido como "prueba de trabajo" que certifica que la instrucción fue realizada por sus ordenadores a la "prueba de participación" donde se recompensa los que aportan financieramente su capital, es un cambio complejo sin embargo desde el punto de vista ecológico posee un impacto enorme en el mundo de las criptomonedas.
El funcionamiento de Ethereum consumía anualmente la misma cantidad de electricidad que Nueva Zelanda sin embargo gracias esta actualizacion la cotizacion se reanudo en las distintas plataformas de criptomonedas.
Fuente: El Economista